9 de marzo de 2005

En la variedad está el placer

En la Zona G de Bogotá, La Cigale, un lugar para tomar vino, buen vino, y por copas. La carta es generosa y detallada, apenas para disfrutar del vino sin necesidad de ser un experto.

No es que usted sea un catador de primera categoría ni mucho menos. Pero uno que otro cursito le ha hecho afinar el paladar, y ya no se toma cualquier vino, como hacía antes. Tampoco sale con cualquier vieja, como cuando era una manojo de hormonas. Ahora lo suyo es la selectividad. Y si en esas anda, lo mejor que puede hacer es ir a La Cigale, pues es el único sitio en el que se puede pedir vino por copas, pues tienen unos dispositivos o jeringas especiales que, por medio de una pipeta de nitrógeno, permiten servir una copa sin que el resto de la botella haga contacto con el aire. Es más: puede tomarse una copa de blanco con la entrada y una de tinto con el plato fuerte. Lo mismo puede hacer con las mujeres: una para ir a tomarse un buen vino con una buena comida en La Cigale, y otra para irse de rumba. Usted decide.
Aquí lo importante es el conocimiento (tanto en mujeres como en vino). Como no se trata de andar probando a lo loco, la carta de vinos tiene explicaciones básicas sobre las cepas, cuando se trata de vinos americanos -como el chileno, californiano o argentino-, y sobre las regiones, cuando se trata de vinos europeos -como el francés y el español. Así mismo, trae sugerencias sobre las cepas que se deben pedir con cada plato. El menú tiene cosas muy típicas francesas, como riñones, escargots, entrecotes, mejillones, crepes y pato, pero también hay cinco variedades de carpaccio, champiñones, tortillas madrileña y cataluña, y otros platos mediterráneos. El chef y administrador es François Cornelis, un belga que llegó a Colombia hace varios años y que se esfuerza por estar aunque sea dos minutos con cada uno de sus comensales. El restaurante, ubicado en la agradable zona G de Rosales, fue diseñado por Jaime Enrique Quessep, que logró que el restaurante de tres pisos tenga visibilidad e interacción con la calle a través de grandes ventanales. En varias de las paredes hay muebles de madera con botellas de vino por todas partes. El sitio, definitivamente, invita a tomar vino. Y el que vino al mundo y no bebe vino ¿a qué vino?

LA CIGALE
Entrada sugerida: Terrine de lapin dijon (terrine de conejo envuelto en tocineta ahumada con salsa de mostaza a la antigua) $ 7.200.
Plato sugerido: Magret de canard trois sauces (pechuga de pato con salsas de agraz, pimienta, y coñac y naranja) de $21.900 a $38.800
Entradas: de $6.300 a $23.000
Platos fuertes: de $16.200 a $38.800
DIRECCIÓN:Calle 69A #4 -93
Teléfono:400 9906
Bogotá