15 de julio de 2005

Homero, Ilíada

Por: DANIELA MENDOZA

Una Ilíada sin dioses, en primera persona, libre de arcaísmos o jerga de filólogo, con frases que Homero jamás pensó, partida en 21 monólogos. Así de arriesgada es la obra que propone Alessandro Baricco. El escritor italiano reescribió el poema fundacional bajo estas condiciones para ser leído en voz alta y públicamente (pensó también en meterle mano a Moby Dick). Después de lograr su propósito (la leyó ante diez mil personas el otoño pasado en Roma), Baricco la publicó temiendo la ira de hordas de profesores ortodoxos. Contrario a su miedo, la nueva Ilíada ha sido una revelación total sin importar que todo el final, la narración de la caída de Troya, sea un añadido basado en otros textos como La Odisea. Como el propio italiano lo dice: "Borges se habría frotado las manos".

Alessandro Baricco
Anagrama
190 páginas