14 de noviembre de 2007

Paradiso Terrenal

No sabemos qué habría sido de la especie humana si Adán y Eva hubieran aparecido en este Paradiso, lo que sí es seguro es que la habrían pasado mucho mejor en este rumbeadero donde no hay manzanas, pero sí muy buenos licores y excelente música.

Paradiso es uno de esos sitios que nace en el momento justo. Sus dueños —aquellos que empezaron con una licorera y luego siguieron con Gavana—, con una experiencia de doce años en la industria nocturna, no se guardaron nada para inaugurar un bar con ambiente discotequero, donde la unión de muchos elementos clásicos en un entorno moderno da para pasarla demasiado bien. El lugar parece hecho a la medida de todos: excelente ventilación para que no sude la camisa en su primera salida y muchos detalles que invitan a la lujuria, como la decoración palaciega tipo Eyes Wide Shut con mesas grandes, elegantes sofás, baños de cobre y cortinas para esconderse. Aunque se recomienda venir a este bar justo cuando está empezando a salir con alguien, ir solo es también una buena opción, pues Paradiso es el lugar ideal para conocer a las más bellas mujeres, sean clientas o bartenders. Si lo suyo es sentirse tan relajado como en el Edén pero rumbeando, este es su lugar.