13 de octubre de 2005

Tag Heuer & Montoya

En la Fórmula 1, una milésima de segundo vale, y vale oro. Un tipo de precisión que puede llevarse a la vida diaria usando un cronógrafo Tag Heuer edición limitada, el Fórmula Sonrisas.

Ahora las cosas buenas en calidad son también buenas de corazón. La prestigiosa marca Tag Heuer nos trae una razón de mucho peso para adquirir uno de los cronógrafos Fórmula Sonrisas, feliz unión entre la casa suiza y la fundación del mismo nombre, presidida por Connie Freydell, esposa de Juan Pablo Montoya.
Esta exclusiva serie de relojes de alta precisión tiene la particularidad de hacer feliz a mucha gente: a Tag, por haber fabricado semejante joya; al comprador, por saberse dueño de una pieza única, y a miles de niños en Colombia, que se verán beneficiados por los 200 dólares que la marca piensa destinar a Fórmula Sonrisas por cada una de las 200 piezas que componen esta edición. Haga cuentas; es mucho dinero, pero ningún centavo será en vano.
Ahora, supongamos que usted no es un filántropo, que el detalle de la donación lo tiene sin cuidado, y que lo que le importa es saber a qué pieza se está haciendo. Pues bien, agárrese.
El cronógrafo cuenta con las seis características fundamentales de un reloj deportivo profesional: corona a rosca, índices y agujas luminosas, cristal de zafiro, bisel giratorio unidireccional, estanquidad hasta 200 metros y doble cierre de seguridad. Hay tanta belleza y tanto cuidado en este producto, que igual podrá servirle para hacer ciclomontañismo o ir a una fiesta.
Toda la campaña con Fórmula Sonrisas está avalada por Tag Heuer, que permitió que el logo de la fundación apareciera impreso en el rojo tablero del reloj. Y ya que estamos en campaña, SoHo quiere abanderar otra: el "apellido" de la marca no se pronuncia "jiuer", sino "joyer", como joyero, pero sin la "o" final.
Para aquellos puntuales empedernidos (¿hay de esos en Colombia?) les contamos que ya existe una serie en la que podrán medir el tiempo hasta en milésimas de segundos. Aunque en realidad este pequeño gran detalle palidece ante la siguiente estadística: en la Fórmula IRL, Tag cronometra hasta en diezmilésimas de segundo, por aquello de que a los corredores de dicha categoría les da por llegar todos juntos, y nunca se ha equivocado. Es que estos señores suizos no dan puntada sin dedal.
Más información en dispre@cable.net.co

Un Corum inolvidable
La Casa Corum cumple 50 años en el mercado, y para celebrar sus bodas de oro nada mejor que un reloj que tenga muchos de sus componentes elaborados en tan preciado metal.

Les presentamos el Golden Bridge, portento de
diseño, lujo y precisión. El producto de esta ecuación no esotra cosa que la versión mejorada del famoso reloj del mismo nombre, concepto revolucionario y fama internacional, lanzado al mundo hace ya 25 años.
Ningún detalle se le ha escapado a Corum para celebrar este aniversario por todo lo alto. La
marca se ha esmerado, esta vez más de la cuenta,
para crear un producto tan cómodo, como fino
y confiable. Si hay que buscar un objeto donde
se mezcle el buen gusto con lo último en tecnología, este es el Golden Bridge. La exquisita maquinaria del reloj está enmarcada en un palacio de cuatro cristales de zafiro sellados en tornillos de oro que garantizan la estanqueidad (viene de estanque, que según la Real Academia de la Lengua es una embarcación que se halla bien dispuesta y reparada para no
hacer agua por sus costuras) perfecta del conjunto hasta una presión de tres atmósferas.
Cuenta además con estrechos puentes de oro de 18
quilates finamente grabados a mano con volutas rebordeadas, minúsculas ruedas dentadas alineadas y agujas finas caladas de más oro (negro en
esta oportunidad), formando un todo que parece flotar en el vacío. Y como valor agregado de comodidad, el perfil inferior ha sido abombado para que la muñeca no sienta presión (y no
nos referimos a la hermosa mujer que acompañaría gustosa al dueño del reloj. Oro es la palabra fetiche para el Golden Bridge: de oro de 18 quilates es la pulsera del reloj, más oro hay en
la hebilla que acompaña a la correa de piel croco, si esa es su elección en lugar de la pulsera; en oro amarillo, oro rosa y
oro gris -o si lo prefiere, en platino- viene
el reloj, 50 de cada material, para ser
exactos, todos rigurosamente numerados del 1 al 50. 50 es el número mágico, oro es el material clave y "Édition spéciale 50e anniversaire" ha sido bautizada la colección. ¿O es que prefiere esperar otros 50 años?