5 de abril de 2004

Victoria Adams

Esta sí que es la verdadera mamacita. Carga con sus hijos a todas partes y aun así sigue despertando los 'peores' pensamientos. Ya todas sus compañeras del extinto grupo Spice Girls se quedaron sin sazón, pero Victoria, en cambio, no se contenta con la fama de su esposo, el futbolista David Beckham, y sigue en la jugada como delantera. Ahora planea editar nuevamente un álbum de pop como solista (ya sería el tercero, aunque los anteriores nadie los conozca), que saldrá al mercado en mayo. Para no ir a cometer otro fuera de lugar, contrató a Cathy Dennis, la productora de Britney Spears y Kylie Minogue, para que le asegure un par de éxitos.
Esperamos que no le saquen tarjeta roja, como ya lo hizo su última compañía discográfica tras el fracaso musical de su debut como solista, al lado del productor Damon Dash. Nosotros no apostamos por sus dotes musicales, pero en cuestión de belleza sí aseguramos que es todo un gol de oro. Su quiebre de cintura, su elegancia y su perseverancia la hacen una gran mujer, de esas que suelen estar detrás de un gran hombre, aunque no tan detrás, porque Victoria tiene brillo propio. ¿O no tenemos la razón?