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10 de abril de 2006

Confesiones de Titi Cantor

Hablamos, fotografiamos y comimos en el restaurante de la modelo Titi Cantor y, la verdad, no podríamos decir cuál de las tres cosas fue más placentera. Para que vea que no estamos mintiendo, le recomendamos disfrutar de las fotos, leer la entrevista de sexo y pasarse por Trento pasta gourmet.



La pregunta obligada. ¿Usa comida en el sexo?
Claro. Depende de la situación, pero sí, creo que lo hace más erótico.

¿Qué usa?
Principalmente fresas, chocolate y la crema chantilly, que a las mujeres nos encanta.

¿Cuándo fue la última vez que la usó?
No puedo dar una fecha específica, pero sí hace parte de mi vida sexual.

¿Y ha usado la comida del restaurante en el sexo?
No, hasta allá no he llegado.

¿Ha tenido sexo en su restaurante?
Ganas no me han faltado.

¿En qué lugar lo haría?
Me parece muy romántico en la terraza, lo malo es que al lado hay un parqueadero. Además, a mi socio no le gustaría saber.

¿Por qué no ha tenido oportunidad, si el restaurante es suyo?
Porque siempre hay alguien, algún empelado por ahí. Y como son ellos quienes tienen las llaves del sitio, son los que abren y cierran, es complicado. El hecho es que sí lo he pensado.

Ese cuento de que los hombres se masturban con más frecuencia que las mujeres, ¿es cierto en su caso?
Sí, porque los hombres son mas instintivos que nosotras. Yo no tengo problema con el tema, pero si las mujeres tenemos una pareja estable podemos perfectamente no hacerlo, en cambio los hombres son más carnales.

¿Se masturba?
No es algo regular, pero claro que lo he hecho.

¿Qué prefiere, hacérselo o que se lo hagan?
Que me lo hagan es más rico. Lo otro es más aburrido.

¿Con qué se masturba, o la masturban?
Nosotros (Titi y su esposo, Tommaso) tenemos una vida sexual muy activa y tenemos complicidad de pareja, pero no es que yo tenga algo así como "mis juguetes".

Pero ha usado algo más que dedos...
Si, claro, pero eso es parte de mi vida privada. Nos gusta y compramos muchas cosas.

Pero cuéntenos al menos una de las cosas que haya usado.
Todos los aceites, lubricantes y cositas de colores y sabores.

Récord de orgasmos en una sesión de sexo.
No puedo dar un número exacto, pero sí sé que han sido muchos. Por fortuna tengo facilidad para eso.

A pesar de tener facilidad para llegar al orgasmo, ¿ha fingido alguno?
Sí.

¿Por qué?
Porque me dio pesar.

¿Ensayó para que saliera igual a uno real?
No, fue algo del momento. Yo ya no podía más y simplemente lo hice.

¿A qué edad perdió la virginidad?
A los 17 años.

Sexo oral. ¿Le gusta?
No me mata, pero sí.

¿Hacerlo o que se lo hagan?
De hacerlo, lo hago, pero mejor que me lo hagan.

¿Por qué es más fácil para las mujeres dárselo a un hombre que hacerle sexo oral?
No sabría responder. Cada mujer es diferente. A unas no les gusta, otras tal vez están en la adolescencia y prefieren otras cosas, pero no hay una razón establecida. Yo no sé si sea asco o qué. Aunque claro, eso del asco depende también de a quién se le hace.

¿Y que hay de los tríos?
No, nunca lo he hecho y no lo haría ni borracha.

¿Ni porque se lo suplicara su esposo de rodillas?
No, no me gusta. No es que tenga algo contra eso, sino que para mí la relaciones sexuales son de dos. Me lo han preguntado e incluso insinuado, pero no, no lo hago.

¿A qué tipo se lo dio más rápido y quién tuvo que esperar más?
El más rápido fue a la semana, y el que más tuvo que esperar creo que todavía está esperando... y así se va a quedar.

Sitios raros donde lo ha hecho.
En la playa, en medio de la selva, al aire libre, en el baño de la casa de un amigo en medio de una fiesta, en un carro.

¿Y en dónde ha hecho cosas sin llegar a la penetración?
En discotecas, en un restaurante por debajo de la mesa, en un carro con más gente, en una finca.

¿Antes o después de un desfile?
Nunca, al desfile voy a trabajar.

¿Qué es lo más raro que ha hecho?
Me gusta disfrazarme para salir de la monotonía.

¿De qué se ha disfrazado?
De enfermera, entre otros, me gusta mucho.

¿Es solo el disfraz o arma toda una historia alrededor?
Depende de la actitud del momento. He hecho las dos cosas.

¿Se ha filmado?
No. Mi esposo me ha tomado fotos, no pornográficas, pero sí desnuda.

¿Cuáles son sus fantasías?
No son del tipo de hacerlo con un actor famoso. Son más realistas, más fáciles de cumplir, como hacerlo en lugares raros, por ejemplo en una montaña.

¿Y la ha cumplido?
Lo hice una vez en la represa del Neusa, en medio de un frío impresionante y a punto de congelarme.

La posición que más le gusta.
No tengo una preferida, prefiero ser creativa. Todas me gustan y con todas me es fácil tener un orgasmo.

¿Se lo ha pedido a un hombre?
No he tenido la necesidad. Al contrario, son ellos los que me lo han pedido.

¿Qué sesión de sexo no olvida?
La primera vez que lo hice con Tommaso. Fue impresionante, nunca pensé que se podía pasar tan bueno. Inolvidable.

¿Emborracharse ayuda?
El alcohol desinhibe, pero la verdad yo no lo necesito. Sobria o con alcohol, lo he hecho todo con quien he querido y porque así lo he decidido.

¿La han visto mientras tiene sexo?
No que yo sepa.

¿Y ha visto a alguien?
Sí, pero por accidente, eso que uno abre la puerta de un cuarto y los pilla. Lo que sí hacemos con mi esposo es que tenemos películas porno, eso me perece rico.

Ya aceptó que tiene aceites, lubricantes, películas y que ha usado disfraces. ¿Qué otras cosas tiene?
No, ya dije que lo otro hace parte de mi vida privada.

Pero reconozca, sí hay más cosas.
Sí, hay muchas más.

¿Quién las compra?
Los dos. Él o yo, juntos o cada uno por su lado.

¿Y no le da pena entrar a un sex shop y preguntar por un juguete?
No, nunca me ha dado pena. Ni ahora ni con la parejas que tuve antes.

¿Cuál es su película porno favorita?
No sé. No me sé los nombres ni de las películas normales.