Home

/

Historias

/

Artículo

17 de noviembre de 2005

El más duro y el más poderoso

Elegante, sofisticado y duro como el zafir: es el Safi de Officina del Tempo. Otra maravilla: el cronógrafo Royal Oak Offshore Alighi Polaris, una máquina tan poderosa y de alta precisión.

Italia es pastas, costas, arte renacentista, moda y diseño de vanguardia. Ancona, Italia, es todo eso y el lugar en donde nació Officina del Tempo, hace poco más de tres años, con un claro objetivo: encontrar la mezcla perfecta de tecnología y diseño para fabricar relojes de alta calidad, un look refinado, cuidadosos detalles y de materiales innovadores. El propósito fue alcanzado con creces y a una velocidad sorprendente. En solo tres años de existencia, la marca ha entrado exitosamente en mercados tan exigentes como los de Italia, España, Francia, Estados Unidos, Brasil y México, entre otros, compitiendo hombro a hombro con las casas relojeras más tradicionales. Su fuerte frente a estas es la forma en que rompe moldes y no se queda en el mismo concepto clásico y aburrido de reloj, sino que se atreve a experimentar y a combinar materiales como el acero y la silicona.
Una muestra de los buenos resultados que han tenido con esa osadía en el diseño es este reloj. Lo llamaron Safi y ha sido toda una bomba en el mercado. El Safi resiste temperaturas de entre 60°C y 180°C y no lo afecta ni el más ardiente sol del desierto ni las más ácidas soluciones. Puede casi cogerlo a golpes contra las paredes, pues su caja en acero inoxidable lo hace muy fuerte. O si prefiere, puede irse a bucear y sumergirlo a profundidades de hasta 100 m, pues antes de que él explote, primero estallarán sus pulmones. El reloj le permite también contabilizar con su cronógrafo el tiempo de inmersión y además de estas virtudes, de sus manecillas que brillan en la oscuridad y de su movimiento de quartz, tiene una correa elaborada con una silicona utilizada por los médicos que es cómoda, suave, deportiva y antialérgica. La hay para todos los gustos: azul, amarilla, naranja, negra y roja para que le combine con su pinta de oficina o con aquella que utiliza para jugar golf o hacer deportes extremos, dos tipos de deportes que patrocina Oficina del Tempo.
La buena noticia es que la distribuidora de relojes South American Watch, con sus más de 25 años de experiencia en el mundo de la relojería, supo ver en esta marca todas sus virtudes y trajo a Colombia los mejores modelos de Officina del Tempo, por precios que van desde los US$360, en el caso del Safi. Un regalo si se tiene en cuenta todo lo que es este reloj: calidad, diseño y confort.




ROYAL OAK OFFSHORE

Alta traición, gritaron en el 2003, los neozelandeses al enterarse del movimiento casi ajedrecístico hecho por sus compatriotas, el capitán Russell Coutts y el estratega Brad Butterworth. Los dos habían sido los ganadores del America's Cup del año anterior, la más prestigiosa competencia de veleros del mundo (para entender su importancia basta imaginar que el America's Cup es algo así como si hubiera una sola gran carrera de Fórmula Uno).
Coutts y Butterworth tenían la obligación de defender su título, pero les fue imposible rechazar el ofrecimiento del empresario suizo Ernesto Bertarelli de comandar el velero de su propiedad, que tiene por nombre Alinghi y está registrado bajo el número SUI75. Así, Nueva Zelanda, el país favorito para ganar, perdió la copa ante Suiza gracias a la pericia de estos dos hombres y catorce tripulantes. La versión XXI de la famosa carrera de vela, que fue creada en 1848 por un grupo de norteamericanos, y que cuenta con una audiencia casi tan grande como el mundial de fútbol o el superbowl, quedó en manos de un país sin mar ni playa, mayor indignación para los neozelandeses.
Para celebrar la hazaña del Alighi y su dueño Bertarelli, un joven multimillonario graduado de Harvard, que canalizó una inversión de 55 millones de dólares para la construcción del velero, la marca de relojes Además, Piguet diseñó el cronógrafo Royal Oak Offshore Alighi Polaris, una máquina tan poderosa y de alta precisión como el yate ganador. El reloj posee una caja octogonal dotada con ocho tornillos hexagonales hecha de acero inoxidable, que combina a la perfección con una pulsera negra de caucho de alta resistencia. El Royal Oak acompañará a los tripulantes en el 2007 durante una nueva versión de la carrera para la que se espera que los impredecibles Coutts y Butterworth sigan con el equipo suizo y no participen en nombre de, digamos, ¿Bolivia?