23 de abril de 2009
La fantasía que no he cumplido
Bueno,
aquí estoy de nuevo. Hay una pregunta que hace rato veo en los
comentarios y se las contesto de una vez: cuando tengo la regla no tiro
con nadie. Es incómodo para mí pero sobre todo para los clientes que,
me imagino, no pagan para que alguien sangrando esté con ellos. También
les insisto en que lo primordial de mi trabajo es ganar plata, !muy
buena plata!, pero también gozo mucho cuando lo hago, no siempre, pero
si me lo propongo, puedo venirme mucho y rico. A veces es imposible
porque me sale un cliente asqueroso, que huele mal o que no sabe
tratarme como merezco, y todo eso me baja la nota, pero sí hay hombres
que proyectan confianza, que son amables, caballerosos y que también se
ven muy bien físicamente. En estos días hablaba con una amiga que
trabaja en lo mismo y me decía que se cansaba del sexo porque creía que
ya había hecho de todo y ya nada la sorprendía. Pero yo pienso
diferente, aunque ustedes no lo crean, yo tengo varias cosas
pendientes.
Les quiero hablar de mi fantasía y es una que es recurrente y con
la que me masturbo cuando se me da la gana. Siempre me imagino que
estoy como en una tarima, pero como si fuera en una plaza pública, y no
tengo clara la situación pero me gusta imaginarme que me están juzgando
por algo y es como si me fueran a llevar a la horca o algo así. La
gente que me ve son puros hombres y yo estoy amarrada, como si esperara
un juicio o algo así. De repente, un hombre que está junto a mí, me
quita la ropa y quedo totalmente desnuda ante ellos (son muchos). Y veo
que todos se empiezan a excitar mientras me ven, se bajan los
pantalones y se comienzan a pajear al verme desnuda en esa tarima. Y
como si una voz de un juez ordenara todo, esa cantidad de tipos me
rodean por todas partes y se masturban delante mío. Confieso que me
mojo de solo pensar en esa cantidad de vergas al lado mío. Es una
obsesión rara, es como sentir que TODOS los hombres son para mí, pero
como no todos me lo van a meter se conforman con pajearse mientras me
ven solo a mí, a mí solita. Eso es lo más arrechante que existe.
Siempre me masturbo pensando en eso porque no creo que me pase.
Comienzo metiéndome un dedo, moviéndolo lentamente y luego me meto dos
y si estoy muy arrecha saco mi vibrador (lo compré porque algunos
clientes les gusta que lo use delante de ellos), y me lo meto muchas
veces, primero lento y luego muy rápido hasta que me vengo. El clímax
es cuando esa cantidad de hombres comienzan a eyacular por todas
partes, nunca imagino bien sus rostros pero sí sus cuerpos y es lo más
excitante que hay.
Bien dicho, es una fantasía y en eso se quedará. Lo máximo que he hecho
es hacerlo con tres hombres, pero creo que eso es otra historia. No sé
si les interese.