Home

/

Sexo

/

Artículo

9 de marzo de 2005

Chat erótico con Eva, de La W

Cuando Eva Rey habla en La W, todos nos derretimos. Envuelta en sombras para que no perdiera su misterio, SoHo la fotografió en Madrid. Desde allí accedió a hacer un chat con Conchita, nuestra nueva columnista. Tome aire.

Eva Rey: ¿Hay alguien? Hola, Conchita.
Conchita: ¿Cómo empezamos esto?
E: Ni idea.
C: Como siempre los preámbulos nos corresponden, porque los hombres de eso ni idea.
E: Je, je, creo que ya tengo alguna lección con colombianos.
C: Cómo me gusta saltarme estas cosas. Aunque el consabido one night stand es complicado. ¿Lo has hecho?
E: Sinceramente, no. Me da mamera conocer gente una noche. Creo que me arrepentiría al día siguiente.
C: Pero eso dura poco también... uno se levanta diciendo, soy una perra y ya está. Después sale de esa pena igual que entró.
E: Sí, es un forma de verlo.
C: ¿A las cuántas salidas hay sexo contigo?
E: A medida que me hago mayor, menos citas.
C: ¿Qué es lo peor que te puede decir un hombre para no conquistarte?
E: Hablar de él mismo.
C: ¿Qué tiene que decirte para que haya sexo en la primera cita?
E: Me tiene que decir que le encantaría ser mi consentidor.
C: ¿Y te gusta consentirte cuando estás sola?
E: A todas nos gusta.
C: ¿Qué te gusta que te consientan?
E: El culito es feliz cuando lo consienten.
C: ¿Cómo se debe consentir un culito? Tres consejos.
E: Uno solo, con ternura.
C: ¿Qué tipo de hombres te gustan más: colombianos o españoles?
E: Colombianos, definitivamente.
C: ¿Y eso por qué?
E: Porque me encanta vuestra forma de hablar y de ver la vida.
C: ¿Qué palabras colombianas te excitan?
E: China linda, consentir.
C: Ustedes hablan tranquilamente de culo y de tetas, ¿no? ¿Qué podrías decir de eso?
E: Podrían ser mejores. Son pequeñitas, pero no me quejo.
C: ¿Qué hace un hombre en la primera cita para que lo mandes al demonio?
E: Cagarla. Ser grosero y agresivo. Los que son groseros de palabra, en general.
C: Pero después, en confianza, un par de palabritas sucias en la cama no están mal.
E: Depende del momento y la persona, pero no me suele gustar.

C: ¿Una mujer puede seducir a otra? ¿ qué tiene qué hacer?
E: Ni idea. Nunca traté de seducir a una mujer, pero imagino que lo mismo que a un hombre. Si me quieren seducir a mí, que se acerquen seguras y ronroneen. Me halaga que una mujer me quiera seducir, no sé por qué.
C: ¿Qué admiras físicamente de otra mujer: sus tetas o su culo?
E: Pienso que un buen culo gana a unos pechos.
C: ¿Tendrías algo con alguna solo por probar?
E: No.
C: Bueno, pero un buen par de tetas son buen recurso, ¿no? ¿Cómo son unas tetas perfectas?
E: Firmes de joven, caiditas de mayor, pero nunca operadas.
C: ¿Y nunca has estado con un hombre que te proponga buscar a una mujer que les guste a los dos y hacer algo?
E: No.
C: ¿Si hicieras un trío por darle gusto a tu pareja preferirías dos mujeres y un hombre, o tú y dos hombres?
E: Nunca una mujer, de pronto dos tíos.
C: Eso sí que funcionaría, pero les jode el ego a ellos, ¿ves? Qué: ¿Uno negro y otro blanco?
E: No me importa, no tengo un tipo específico.
C: ¿No te llama ese mito de los superdotados de color?
E: No, ya lo probé y no vale la pena, no importa el tamaño para nada.
C: ¿Me vas a decir que los negros no son buen polvo?
E: El mío no.
C: Bueno, no podría decir lo mismo.Por supuesto que hay cosas más importantes, pero el factor tamaño incide.
E: No me gustó grande: mejor pequeñita y manejable, da más juego.
C: El lugar más extraño en que lo has hecho...
E: En una terraza de un edificio, en Bucaramanga. Estaba la emoción de que podían subir los vecinos en cualquier momento.
C: ¿Tienes vecinos mirones?
E: No eran mis vecinos, pero todos somos mirones.
C: ¿Qué es lo mejor que te ha tocado de mirona?
E: Todo, me encanta mirar, soy muy mirona.
C: Pero, cuéntame, ¿qué has visto? ¿Qué te excita más: un texto erótico o una película que muestra por dónde va la cosa?
E: Texto erótico siempre. La imaginación y la expectativa son el mejor afrodisíaco.
C: Y con el colombiano ¿fue un solo polvo o te fuiste de tiro largo?
E: Novio.
C: ¿Has tenido cuántos novios colombianos?
E: Uno.
C: ¿Y has tenido sexo con algún entrevistado de La W?
E: Nunca, no me da tiempo. Siempre me echan de los sitios.
C: ¿Te gustaría con alguno?
E: Michael Bubble era un lindo.
C: ¿Y Julio no es un tipo sexy?
E: Tiene su aquel, de pronto...
C: ¿Algún tipo prohibido te ha tentado?

E: Sí, pero hay que tratar de pensar, aunque no siempre funciona...
C: ¿Tendrías sexo con un presidente, por ejemplo el nuestro, Uribe, que sabe tanto de mandar y organizar y disponer?
E: Dudo que un tipo como Uribe se interesara en alguien como yo...
C: ¿Él? ¡Creo se interesaría mucho! ¿Y un Zapatero?
E: Nunca a Zapatero.
C: Pero el poder tiene algo de cachondo, ¿no?
E: Sí, Conchita, en eso tienes razón, le da su toque sexy.
C: Saber que te pueden poner en su escritorio de la forma que ellos quieran sin que nadie los interrumpa. Hablemos de posiciones, ¿cuál es tu favorita? ¿Te echarías un polvo entero en cuatro?
E: Me gusta, pero hay que variar, siempre variar.
C: Pero te veo como corta de imaginación en los sitios.
E: Ni tanto. ¿Sitios? Bañera, me encanta la bañera. Y un motel, lo probé y es una de mis fantasías, lo mismo que el mar.
C: ¿En un vuelo Madrid-Bogotá es posible echarse un polvo?
E: De pronto un poquito pero sin acabar. Hay que dejarles siempre con la miel en la boca. Es incómodo, además. Ante todo comodidad.
C: ¿Y qué tipo de incomodidades te gustan? Alguna vez alguien que te haya amarrado o algo así? ¿El asiento de atrás de un carro...?
E: Las que siento como una provocación juguetona. Esa del carro me gustaría y que me atasen también, pero yo elijo quién y cómo.
C: ¿Lo has hecho en un estudio de radio?
E: Nunca suelo mezclar trabajo con placer, aunque de pronto en La W cambie de idea...
C: ¿Y te han esposado?
E: No, pero es lo próximo.
C: ¿Con?
E: Tengo al colombiano en mente, pero no lo puedo nombrar...
C: Dilo, dilo, dilo.
E: No, no, no.
C: Estás como los artistas: "cuando salga te cuento". Nos tocará cambiar de tema. ¿Eres de las que gozan untándose cosas en la piel?
E: Sí, me gustan, pero pocas veces lo hago. ¿Te gusta la crema?
C: Sí. ¿Te han regado una botella entera de cava encima? Eso sí que me parece un desperdicio. Mejor tomársela, ¿no?
E: El cava está muy rico y te lo puedes tomar mientras te lo rocían.
C: Un chorrito en el cuerpo y otro directo a la boca. ¿y la crema?
E: Lo mejor para empezar a entrar en calor es un juego de masajes con ese tipo de cremas y aceites.
C: Deli, ¿por dónde empezar y dónde terminar?
E: De abajo a arriba. Empieza por el cuello, va hacia abajo pero sin pasar por el centro, hasta los pies. Para acabar, ya calentitos, donde tiene que acabar, pero despacio, muy despacio, largoooooooo.
C: ¿Y el centro cuándo? ¿Cómo?
E: Cuando ya no puedas más.
C: ¡Rogarles! ¿Has llegado a un orgasmo sólo a punta de masajes?
E: Sí, si te masajean en ese punto que te marea. Hay que saber usar las manos. El secreto está en el tipo maduro que sabe aguantarte, no se precipita y te vuelve loca...
C: Pero siempre llega la necesidad de la penetración, ¿no crees?
E: No, hay veces que no te apetece la penetración, se puede jugar y disfrutar sin llegar a penetrar. La penetración no es el fin último.
C: El equilibrio entre morirse por acabar y saber esperar...Te confieso que el sexo tántrico no es lo mío, prefiero todo hasta el final.
E: Te voy a presentar al tipo que te va a hacer olvidar la penetración...
C: Por favor...
E: No he practicado el sexo tántrico y no me llama. Soy muy racional y terrenal, no me llama lo místico.
C: ¡Excelente actitud! La carne es la carne. Pero, si no es necesaria la penetración, ¿por qué no te llama la atención una mujer? Las mujeres sabemos más de eso, ¿no?
E: Conchita, siempre se aprende y siempre hay quien puede enseñar...
C: ¿Qué me podrías enseñar tú?
E: Yo nada, pero sé quién sí.
C: En números, ¿cuántos hombres en la vida te han causado verdadero y profundo placer?
E: Los últimos tres que han estado en mi vida.
C: Hablemos otra vez de fantasías.
E: Es que no estoy muy segura de mi fantasía.
C: ¿Has soñado que haces el amor con algún oyente?
E: No, las voces me provocan pero no hasta ese punto. Usar juguetitos, me gustan los juguetitos.
C: ¿Como cuáles?
E: El consolador de Sex and the city. Me gusta usarlo en pareja. ¿Sabes qué es el Lady Bug, ¿lo has usado?
C: Buen recurso. ¿Cuántas veces te gusta?
E: Una, cuando se hace bien una me basta porque quedo cansada. Después se puede empezar otra vez.
C: ¡Por las mañanas! ¿No es impresionante?
E. Es el mejor. Huevos, tostadas y un zumito rico de naranja.
C: El mañanero y luego juntos a la ducha, ¿no? Y ahí sigue la cosa.
E: Lo perfecto.
C: Aunque el agua a veces no ayuda, ¿no? Hay que estar cachondos...
E: La ducha está bien, aunque prefiero un baño.
C: ¿Las palabras que odias oír durante?
E: No soy muy habladora y no me gusta que me hablen. Un susurro cariñoso es suficiente. Calladita y discreta, así soy yo.
C: Lo de hablar es rico en el "pre", ¿no? ¿No te han dicho alguna guarrada en el oído que te deja con ganas de salir corriendo del bar con el tipo?
E: Nunca, Conchita.
C: Ya te veo la risita desde acá.
E: Je, je.
C: Lo detestable es analizar lo que acaba de pasar.
E: No, a mí sí me gusta hablarlo.
C: ¿Te gusta? A mí me da pereza. Nunca hay que perder la oportunidad de quedarse callado...¿Te has grabado haciendo el amor en video?
E: Nunca.
C: Ver eso después es lo más impresionante del mundo.
E: No a los videos.
C: Ok, posiciones: Dime algo...¿El kamasutra sirve?
E: No he leído El Kamasutra. Se aprende practicando e improvisando.
C: Nada que implique despliegues extremos, lo que fluya , ¿no?
E: Fluir, esa es la palabra.
C: ¿Una posición que te hayas inventado?
E: ¡Está todo inventado!
C: ¿Número máximo de orgasmos conseguidos en una noche?
E: Eso es personal, pero entre 0 y 5 anda el número.
C: Número máximo de personas con que has compartido la cama en una sola noche.
E: Una, lo siento, no puedo sorprenderte.
C: Edad a la que te desvirgaste.
E: Diecisiete. Con mi mejor amigo, que hoy en día sigue siéndolo.
C: ¿Sentimiento de culpa, o repetición?
E: Nunca repetimos. No fue para tirar cohetes sexualmente hablando, pero lo recordamos con cariño...
C: Los amigos de mis amigas son mis amigos... ¡Uf!, vaya lío.
E: Siempre se empieza siendo amigo con derecho y evoluciona o no.
C: ¿Todos tus amigos han querido ser tus amantes?
E: Los hombres siempre quieren algo más y lo intentan...
C: ¿Sueles usar alcohol o drogas a la hora del sexo?
E: Drogas no...pero una cenita con vinito pone todo mucho mas fácil.
C: La cosa más dolorosa que has hecho en la cama.
E: Desvirgarme, imagino.
C: Imaginas.El polvo más largo...
E: Con mi colombiano.
C: La cosa más loca que has hecho.
E: Irme a Colombia con mi colombiano cuando apenas estábamos empezando, casi no lo conocía, no tenía apenas dinero.
C: Sácame de esta duda: ¿varios flancos a la vez?
E: Soy egoísta en ese tipo de información. No debería contestar,
pero sí.
C: ¿Por plata serías capaz? Digo, con un tipo delicioso.
E: Por ahora tengo para vivir, así que no. Pero si Beckham me llama y encima me paga...
C: ¡Por eso, tía! Hablando de egoísmo, ¿te das mucho placer a solas?
E: Nadie me conoce mejor que yo.
C: ¿Alguien te ha hecho sentir igual de bien que contigo misma? ¡El colombiano!
E: ¡Le diste ahí!
C: Pero ese tipo es un dios.
E: No, pero es mágico.
C: Los colombianos, y los hombres en general, ¿te gustan maduritos?
E: Ahora empiezo a ver atractivos a los maduritos. Mayores de 45, no, en principio. Pero los bebés me dan pereza.
C: ¿Cuántos colombianos te han tocado?
E: Solo uno, prometido.
C: Paralelo sexual entre el colombiano y el europeo...
E: El colombiano es más sensual, aunque el europeo tampoco está mal...
C: ¿Qué es lo mejor que le has enseñado a un bebé?
E: Nunca he estado con nadie más joven que yo, no me seduce.
C: ¿Existe la manera de enseñarle a alguien a no correrse tan rápido, o esa es labor personal e intransferible?
E: Tú lo puedes ayudar. Que te avise cuando esté a punto y lo empujas fuera para volver a empezar.
C: ¿Las pajas ayudan o no colaboran en nada?
E: Pregúntales a ellos.
C: ¿Te gusta verlos en eso?
E: La verdad es que no es de las cosas que más me gustan, no me pone.
C: Es una buena táctica para aprender cómo les gusta...
E: Pues depende como quieras aprender.
C: ¿Eres buena en ese campo?
E: Se lo tendrás que preguntar a mi pareja.
C: ¿Eres de las que toman la iniciativa solitas o te lo tienen que pedir?
E: Ambas.
C: ¿Y se lo pides a tu pareja, que te haga la miné? ¿o encuentras más excitante que él solo baje?
E: Ante todo confianza para pedir.
C: ¿Qué es lo más arriesgado que has pedido?
E: Nunca pido nada arriesgado, porque las mujeres siempre jugamos con la ventaja de que el hombre está dispuesto a todo.
C: ¡Aplausos! Pero no creas, ellos tienen su pudor.
E: Lo sé, y eso también me gusta.
C: Por ejemplo, eso que decías de dos tíos a la vez, ¿no crees que les daría duro aceptar que también es posible?
E: No, dije que si tengo que elegir prefiero dos hombres a mujer y hombre. Pero soy de pareja. Dos es perfecto, tres son multitud.
C: Bueno, pero a veces no te ha gustado coquetear con alguien solo para poner el ambiente caliente.
E: Coquetear es parte del juego y me encanta. Me encanta jugar para luego no concretar...funciona siempre.
C: ¿Nunca más allá del coqueteo? Digamos, una infidelidad pasajera.
E: No voy a decir que no lo he hecho... Conchi, te tengo que abandonar.
C: ¿Ya?, ¿sin preámbulos, como un hombre desconsiderado?
E: Je, je. Si llevamos más de una hora, cuando quieras volvemos a hablar.
C: ¿Te pido un taxi?
E: No, me gusta caminar. Un beso.