14 de junio de 2005

A calentar en Mink

Antes de la rumba tiene que haber un sitio en el que usted pueda tomarse unos tragos de calentamiento. Un lugar para conversar,disfrutar un café o aplicarse un par de cocteles antes de.

Hay mujeres que son muy elegantes, como Gwen Stephan. Esta es una de esas. Qué más descriptivo que un abrigo de Mink para hablar de ella. El problema es que usted está saliendo de una relación muy larga. Todavía le cuesta pasarla bien. No se engañe: cada mujer se aparece cuando toca. Si hay mal timming, nada que hacer, solo gozar el momento. Mink es el sitio al que tiene que ir con esa que le quita el aliento, la que es capaz de coger sola un taxi a donde sea y no necesita de usted para nada. Está ahí nada más porque quiere, porque la música es buena y porque sabe que Mink es un lugar al que se va a "calentar", como dicen por ahí.
No lo tome a mal: con calentar nos referimos a tomarse unos tragos antes de la rumba. Ella ya calentó todo lo que tocaba y no está buscando nada más que un buen rato. Solo le interesa conversar y, si la noche da para más, irse con usted a bailar o a otras cosas. Depende de sus propuestas. Ahí están sus amigos buscando la manera de seducir a sus blind dates, mientras usted bendice el cielo por no tener que acudir a los shots de Mink -que incluyen un Flat liner, hecho de sambuca, tequila y tabasco; o un Kamikaze, con vodka, triplesec y jugo de limón- para lograr una frase, al menos una frase que lo deje listo para el siguiente paso.
En Mink usted es el rey del cortejo (lástima que sea también el rey del despecho, porque con una mujer como la que tiene en frente no pude ocultarlo). Gracias a dios, los demás tienen cocteles tan femeninos como el Suave brisa -que tiene licor de banano, ron, jugo de naranja y jugo de piña- o el Cielo azul -con ron blanco, Hipnotic, soda y hierbabuena- para conquistarse a las mujeres convencionales. A usted le basta con concentrase en los cocteles para hombres -como el Barón rojo, que tiene whisky, soda y gotas amargas. Y si se le escapa la mujer fatal, que no tiene nada de fatal sino que sabe lo que quiere, agárrese de los postres o de los cafés de Mink. Si hay mucha hambre, pídase una tapa de terrine de quesos, saborizada con tomates secos en aceite de oliva y olvídese de todo lo que ha aprendido para conquistar mujeres. Esta es una "elegante", una de esas que no come cuento y con quien la noche dura hasta el infinito. Mink es solo el principio.

MINK

Dirección: Cra. 12A No. 83-20
Tel.: 6101708
Precios: tragos de $7.000 a $16.000, tapas de $17.000 a $19.000, botellas de $60.000 a $630.000
fotografía: andrÉ klotz © 2005
asistente: felipe bohÓrquez