El ex boxeador norteamericano a través de una entrevista se sinceró sobre sus carreras más memorables
Nacido en Brooklyn, Nueva York, también conocido como Malik Abdul Aziz, de 55 años, es un reconocido boxeador de pesos pesados que ganó dos veces el título mundial en la década de los 80. Fue significativo porque hasta el momento es el deportista más joven en conseguir tal título.
El profesional es recordado también por su mal carácter fuera del ring de boxeo. La más reciente pelea se dio cuando fuera de sus casillas atacó a un fan borracho que lo estaba molestando durante el despegue de un avión, el golpe fue tal que despertó de la borrachera al joven. Sin embargo, esa no fue de sus mejores peleas, las verdaderas ocurrieron en plena competencia.
Recientemente, participó en una entrevista titulada Hotboxin’ With Mike Tyson y producida por Stephen Fulton, donde iba a tocar el tema de las peleas más duras que el ex boxeador tuvo que atravesar durante toda su carrera. Al respecto, Mike reveló “Yo, he sido mi pelea más difícil siempre”.
Respecto a su competencia en el cuadrilátero, señaló a los siguientes jugadores:
-Donovan Ruddock
-Lennox Lewis
-Evander Holyfield
De hecho, la de Holyfield pasó a la historia luego de que en la revancha en 1997 le arrancó la oreja a su oponente. Acto que hoy promociona con merchandising de gominolas de marihuana y de lo que por supuesto no se arrepiente, al contrario se siente orgulloso.
Así mismo, el deportista hizo memoria y confesó que el único combate en el que actuó luego de fumar hierba, en los 2000. Fue cuando compitió con Andrew Golota, pelea que no duró mucho, luego de que Golota se retirara luego del primer salto de Tyson, “pensé que no había valido la pena entrenar a este tipo... Es un gilipollas”, manifestó.
El ex boxeador le rompió la mandíbula, sufrió una fractura de pómulo y una conmoción cerebral durante el combate. Sin embargo, como Tyson fue encontrado positivo en el control antidopaje, su victoria fue anulada.
“Yo también veo algunas de mis derrotas como mis mejores combates”, agregó, calificando esas derrotas como parte de un proceso de aprendizaje. “No me tomé en serio a mí mismo. Creo que eso es ser humilde... Sabía que no era dios, aunque la gente me decía que lo era”, reveló.
Tyson será siempre recordado por su intimidadora forma de pelear en el campo de acción. La ferocidad de este deportista nunca antes se ha visto. Ha sido protagonista de numerosos altercados fuera y dentro del ring. Fue clasificado en el puesto número 16 por la revista The Ring en la lista de los cien pegadores más grandes de todos los tiempos y número uno para la ESPN en su lista de los mejores pegadores de la historia de los pesos pesados.