La noche estuvo llena de sorpresas, sensualidad, talento y seducción.
Desde el pasado 6 de julio la cantante española Rosalía empezó su “Motomami World Tour” por todo el mundo, específicamente a Europa, Estados Unidos y algunos paises de Latinoamérica.
En esta gira la artista presenta ante millones de personas su tercer disco titulado “Motomami”, que hasta el momento ya se posiciona como uno de los mejores del año y del cual, sus fanáticos podrán disfrutar de 16 canciones.
Concierto de Rosalía en Bogotá
Este miércoles 31 de agosto fue el turno de la capital de Colombia para deleitarse y cantar a grito herido los mayores éxitos de la joven, como su colaboración con el paisa y cantante del género urbano J Balvin en “Con Altura”.
El Movistar Arena fue el epicentro del espectáculo, del cual ya se vendió aproximadamente el 90 % de la boletería.
La noche estuvo llena de sorpresas, pues además de cortarse partes del cabello en una de sus canciones, tirarlas al público, subir personas al escenario y hacer los mejores y más sensuales twerks, hizo diversas confesiones que se robaron aún más la admiración y el amor de sus admiradores.
Una de las partes más emocionantes del show fue cuando cantó “Bizcochito” mientras subían al escenario varios influenciadores, bailarines y asistentes con los atuendos más llamativos de la noche.
En el lugar también fueron vistos figuras públicas como Lina Tejeiro, Carmen Villalobos, Michel Brown y su pareja sentimental Margarita Muñoz y creadores de contenido como Ami Rodríguez y Camilo Triana.
Por ejemplo, en un primer momento la española afirmó que su primer amor había sido un Colombiano que aparentemente la habría dejado y que ahora estaría viendo lo exitosa que es.
“Tengo que hacer una confesión. Algo que nunca he dicho hasta ahora. Mi primer amor fue colombiano. Es de aquí. De ojos verdes”, expresó entre risas como una introducción para cantar la canción principal de su álbum.
Así también, reconoció que en un momento en el que se encontraba en Estados Unidos, conoció a una mujer que se convirtió en una gran amiga y que le enseñó a hacer pandebonos. Desde ese momento la convenció de que viniera al país y finalmente fue así.
Es usual que los fanáticos lleven pancartas en el que le escriben mensajes llamativos, emotivos y hasta chistosos a sus artistas y que con suerte son leídos frente a todos.
Uno de ellos fue el de una mujer que decía que le había llevado pandebonos por lo que Rosalía hizo todo lo posible porque entre el público le pasaran una bolsa y sin pensarlo dos veces abrió la bolsa y se comió uno.
El público enloqueció mientras ella saboreaba cada mordisco, sin embargo, todo debía continuar, aunque confesó que si fuera por ella se quedaría comiéndoselos todos.
“Me comería la bolsa entera si no tuviese que cantar toda la noche”, expresó.