Historias

¿Es posible amar y desear a dos mujeres al mismo tiempo?

Por: Letta

Si usted se ha visto en esta encrucijada tiene que leer este texto. Acá le presentamos el poliamor. Sus ventajas y desventajas sexuales y sentimentales.

Hace menos de un mes conocía a un hombre a quien llamaré Jesús. Tiene 34 años y una fantasía algo extraña para mí. No sé si egoísmo o pendejada. Él quiere tener dos novias para amar, vivir, dormir y tener sexo. Jesús quiere que ellas se amen y lo amen, bailen los tres en las fiestas, salgan a comer y se den algunos besos en la calle para llamar la atención de los más mojigatos. (Yo viví con una ninfómana)

Se llama poliamor y está documentado científicamente. No es un invento de Jesús. En el libro de mi biblioteca ‘La ciencia del sexo’ encontré algunos datos sobre el tema. Por ejemplo, el poliamor no tiene nada que ver con el mundo swinger. No se trata de un intercambio sexual de pareja. Va mucho más allá.

Habla de la capacidad de amar a más de una persona a la vez y ser romántico (talento que tienen muchos hombres). Pero la diferencia con la infidelidad es que acá reina la honestidad y todos los implicados conocen las reglas del juego. No hay secretos ni cachos. (El amor no tiene género y SoHo se lo demuestra)

Decidí hacerle una pequeña entrevista a Jesús, quien me causa mucha curiosidad y ha intentado dos veces en su vida el poliamor. Con la información y anécdotas que me confesó, decidí hacer un listado de ventajas, desventajas y datos. Todo relacionado al sexo, sentimientos y vida cotidiana.

Este fue el resultado y lo más importante es que usted saque sus propias conclusiones y piense si se le mide.

La felicidad de estrenar juguete. Al principio en el poliamor todo es divertido y novedoso. Cada uno está dispuesto a descubrir algo nuevo en sus sentimientos y sexualidad. (¿Cómo combinar el amor y el desempleo?)

Alimenta el ego. A Jesús y sus novias les gustaba estar en lugares públicos, darse un besos y llamar la atención.

Cuidado. Ya no es una sola mujer pendiente de usted: son dos. Ideal si usted es un hombre mimado.

Esto no es de la noche a la mañana. Entonces Jesús eligió a dos personas que le ofrecían cosas diferentes. Se complementaban. Una era más fría y la otra más tierna. Era un balance.

Se goza mucho en el sexo. Hay variedad, tríos y un espectáculo lésbico. Además todos están dispuestos a nuevas sensaciones y experiencias. (La mejor manera de conectarse con una mujer en el sexo)

Jesús, por su trabajo, viajaba mucho. Entonces ellas no se aburrían. Hacían planes juntas y se dedicaban tiempo. 

Lo que puede ser algo bueno en momentos también es algo malo. Por ejemplo, pueden existir menos celos.

Jesús encontró que todos esos demonios que tiene un noviazgo eran más pequeños. Pero en ocasiones los defectos se multiplicaban y podían complicar las cosas.

A la gente le choca que un hombre o una mujer tenga más de un compañero. No es fácil decírselo a los amigos y familia. Siempre se recibirán críticas.

No hay reconocimiento social. Es tabú y hay otros temas legales muy difíciles. Y mucho menos esto puede ser considerado como una familia. (Consejos para no ser polvo de gallo)

¿Fidelidad? Jesús hizo un pacto con sus novias. Pero dice que es complicado cumplir. Siempre hay tentaciones porque las personas que se le miden al poliamor son de mente abierta y quieren descubrir cosas nuevas.

Jesús no miente. Jamás lo haría. Las mujeres son complejas. Ponerlas de acuerdo era algo complicado. Así como organizar una salida, un paseo.

Si se quiere triunfar hay que dominar la inteligencia emocional. Respetar la independencia porque cada uno es un mundo. También hay que dedicarle tiempo. (8 cosas que ellas aman y odian del sexo oral)

Jesús cree que el amor puede nacer. Para él, este sentimiento es una amistad (muy fuerte) con una dosis de buen sexo. Con estas reglas podría existir. Pero ojo siempre habrá dos que se quieran más.  

El poliamor es un reto psicológico. Hay que ser maduros. También hay que tener en cuenta la exigencia sexual que implica estar con dos mujeres al mismo tiempo.  

Por mi parte, soy egoísta y aún me cuesta creer que esto sea posible. Lo mejor es que la ciencia me respalda porque no es común amar apasionadamente a dos personas ni es posible ser feliz por mucho tiempo. También es difícil aceptar que la persona que amamos comparta más intimidad con su otra pareja.

¿Se le mide?

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