El maridaje es el equilibrio del buen tomar y del buen comer. No deje de probar estas combinaciones cuando visite los mejores restaurantes de Bogotá.
1. La cigale Manuel Rey: El entrecôte salsa bordeaux que se preparó en esta ocasión funde sus sabores perfectamente con el sabor del vino Navarro Correas Colección Privada Malbec 2005, ya que el mismo trozo de carne va acompañado de una reducción de vinagre balsámico y tomate fresco. Estos sabores se mezclan con el sabor de la uva Malbec y su sabor frutoso, perfecto acompañante de un fino pedazo de carne.
2. Pajares Salinas, Zuleima Pajares: Si de un plato de mariscos se trata, recomendamos acompañarlo con un buen vino blanco que funda los sabores del comensal. Para nuestro plato marino, el vino blanco Marqués de Riscal Rueda 2006 es el mejor acompañante; en este caso gracias al gusto de la uva Verdejo y la preparación al ajillo de finas gambas se resalta la intensidad de los aromas y ayuda a destacar los sabores del aceite de oliva y los ajos tostados.
3. H. Sasson, Harry Sasson: Se eligió el vino Argum de autor, Tierras de Argumanez. Su aroma intenso, fragante y complejo junto con sus notas aromáticas de frutos rojos maduros y vainilla, se muestra vigoroso, fresco, sedoso, con buena presencia de taninos maduros que dan equilibrio y complementan el sabor de los langostinos gigantes a la parrilla, previamente marinados en jugo de lima y curry verde.
4. Astrid y gastón, César Jiménez: Se buscó complementar con un vino español de la Rioja. El vino, Marqués de Murrieta Reserva 2002, y el plato, un asado de tira al estilo peruano para que los sabores de la comida y del vino se armonizaran entre sí. El vino es de cuerpo medio, evolucionado con estructura después de 24 meses en barrica. Acompaña muy bien este plato, servido sobre una terrina de tubérculos andinos con espinacas y cebollas caramelizadas.
5. Emilia Romagna, Camilo Giraldo: Para un plato característico italiano como es nuestra bistecca fiorentina, su sabor altamente mediterráneo pero sencillo se da gracias al sabor de finas hierbas que queda sellado sobre este grueso corte de chatas, acompañado de la papa piatta. Por eso escogimos el vino Ultra de Navarro Correas, de uvas seleccionadas de viñedos de bajo vigor, donde los rendimientos se mantienen bajos para una máxima concentración frutal, el perfecto acompañamiento para este plato.