Llegó la hora de la despedida

Por: Andrea

Después de un año escribiendo sobre las intimidades de su trabajo, Andrea, la prepago que contó todo sobre su vida, se despide de los usuarios de SoHo.com.co

No sé cómo comenzar este escrito. Lo he dilatado muchas veces porque quise mantenerme atada a ustedes de alguna manera. Durante este año fueron mi compañía permanente, y lo que empezó como un experimento sin mucho entusiasmo de mi parte, se me fue volviendo en una obsesión. Desde mi anonimato, me sentí feliz con ustedes, con sus comentarios, con sus consejos, con su apoyo. Mi trabajo no es sencillo y como yo hay miles de mujeres haciendo lo mismo. Pero yo me convertí en Andrea, la de SOHO, y sentí que mi vida se volvía importante para mucha gente. Mi mejor plan fue siempre llegar en las noches a mi apartamento y abrir la página de SOHO y ver todo lo que ustedes me escribían. En medio de esa soledad que implica mi trabajo, ver que mi vida estaba despertando pasiones, rechazos, poemas, canciones, me emocionaba. Me sentí más mujer que nunca. Y así, lentamente, mientras trabajaba, me ponía a pensar en qué historias podría contarles y cuáles no. Cuáles serían de su interés y cuáles no. Cuáles polvos clasificaban para el blog y cuáles no.

Desde enero estoy en estas y jamás pensé que llegaría a diciembre. Primero, porque escribir no es nada fácil. Admiro a los escritores de verdad. Segundo, porque no pensé que me fueran a salir tantas historias. Como les dije más de una vez, finalmente mi vida es tirar y tirar y tirar por dinero. Eso es todo. Pero cuando vi que me preguntaban más de mí, de mi vida, de lo que siento y pienso, me fui entusiasmando y el blog se volvió casi una terapia personal. Un diario abierto literalmente donde les conté todo, me desnudé totalmente en pensamientos. Cuando crearon el grupo en facebook, no dudé en meterme a través de una amiga para ver quiénes eran todos ustedes, para ver quiénes eran los y las que me leían, y me imaginaba sus vidas, sus historias. Veía lo que escribían y lo que decían y desde mi anonimato lo agradecí mucho. !Más de 6.600 personas! Qué horror, me siento halagada, feliz.

Es que ser puta es estar sola. Es la paradoja de la que siempre les hablé: estoy rodeada de hombres que pagan por estar conmigo, pero ninguno se acerca realmente a mí. Un año escribiendo para todos ustedes, para mí. Cuando SOHO me propuso la idea pensé que no funcionaría, que solo sería cuestión de un mes... y vean. Me dicen que fue el blog más leído, el de mayor comentarios, el de más seguidores. Me dicen en SOHO que siga escribiendo el otro año. Pero no sé, tengo que pensarlo. Estoy en un momento de mi vida en que no sé si seguir en lo que estoy haciendo o continuar mi vida como cualquier mujer normal, con una profesión normal y no un trabajo como el que tengo. Si es esto último, no sé si les importe saber qué hace y qué haga yo si ya no es tirar y tirar.

Lo que sí les anticipo es que en la edición de enero me verán en la revista. No mostraré mi cara, no quiero que nadie me juzgue, y precisamente como la vida sigue, espero que eso no me traiga problemas más adelante. Posaré desnuda, les mostraré mi cuerpo, más no mi cara. Las fotos son esta semana y espero no decepcionarlos. Lo hago porque muchos esperan las fotos y no quiero defraudarlos. Ante todo, soy una mujer normal, siempre les hablé de mi cuerpo, de que me cuido mucho, pero aún así espero que no me comparen con todas las mamitas que salen en la revista. Sé que me veo bien, eso es todo. Como sea, espero que me sigan valorando por lo que les conté y por esa “amistad virtual” que entablamos. Luis Eduardo, siempre leo tus poemas, por ejemplo. No sabes cómo me subes el ánimo con esas palabras. Pero así con todos los demás.

A las mujeres que me escribieron, me gustaría seguir aconsejándolas en lo que pueda. Me alegro cuando me dicen que las relaciones sexuales con sus parejas mejoraron gracias al blog. Si escribo el otro año, seguiré ayudando en lo que pueda. A los hombres, lo mismo. Recibí insultos, pero, en especial, palabras de apoyo. Yo ahora no sé qué viene en mi vida. Solo sé que navidad y 31 quiero pasarla lejos de Bogotá y cambiar de ambiente un poco. Me han propuesto escribir un libro, pero veo que hay muchos libros de prepagos y mi vida ya quedó expuesta aquí. Me dicen que siga escribiendo de lo que sea. La verdad, me gusta escribir, se me ha vuelto como una terapia y no lo descartaría. Si me dan la oportunidad en esta página, lo haría. No se les olvide las canciones que les dediqué y, sí, soy una puta, pero soy una mujer y así me vieron la mayoría de ustedes. Eso es lo que me importa.

Les deseo lo mejor a todos ustedes. Espero que nunca se olviden de mí, que me recuerden de alguna manera. Este blog fue muy especial para mi vida y sé que lo que venga será gracias a todo esto. Estoy un poco triste de dejarlos, pero es la hora. Se acabó el año, un año donde les escribí una o dos veces a la semana. Un año muy especial. Los voy a extrañar. Un beso. Hasta pronto.