El argentino se lanzó desde un puente.
Argentina está de fiesta, pues la selección albiceleste llevó la tercera copa del mundo 36 años después de que Maradona la levantara en México 86. Un sueño que todo un país y que Lionel Messi tenía pendiente por cumplir, el hombre de los títulos anhelaba ser campeón mundial.
Un sufrido partido lo llevó a coronarse campeones. La fiesta no tiene comparación, desde el domingo 18 hasta la madrugada el miércoles 21 el país festejó. Las calles se inundaron de banderas, cantos, gritos, lágrimas y felicidad, pues la albiceleste trajo el trofeo a casa.
La euforia se tomó a todo el país, pues ser campeones del mundo era un anhelo de los 46 millones de argentinos. Sin embargo, la situación se tornó caótica pues la fiesta desencadenó disturbios, accidentes, heridos y hasta muertos.
Hasta el momento, se sabe que hubo tres muertos y 30 heridos por la celebración que duro casi cuatro días. Uno de los videos que más impactó fue el del hincha que se tiró al bus cuando pasaba bajo un puente, pero no logró caer dentro sino afuera del vehículo en movimiento. De hecho, esto fue lo que hizo que las autoridades tomaran la decisión de desviar la caravana y terminaron helicóptero.
La caravana avanzaba por las calles llenas de hinchas enloquecidos por tener a sus ídolos tan cerca cuando dos hombres se arrojaron desde un puente sin protección. Uno de ellos logró caer dentro del vehículo en movimiento, mientras que el otro se lanzó, pero el bus ya había avanzado por lo que impactó contra la parte trasera y cayó al piso.
Los jugadores de la albiceleste se percatan minutos antes de que le hecho pasara, pues en los videos del momento se les ve diciéndoles que no lo hagan, pero estos hacen caso omiso a las advertencias y deciden lanzarse al vacío.
De acuerdo con el medio La Nación, que pudieron hablar con la Policía Federal Argentina (PFA), los dos hombres sobrevivieron a la caída a pesar de las heridas que les causó su hazaña para ver de cerca al plantel que trajo la copa del mundo.
La felicidad fue complicando las cosas y tuvieron que sacar a los futbolistas por seguridad de las calles. Después de ver el obelisco desde los aires, cada uno de ellos fue a sus hogares a celebrar.