Esta serie mexicana resalta la comunidad, las raíces y la verdadera pasión detrás del balón. En Soho, entrevistamos a uno de sus protagonistas.
Con un estreno programado para este 15 de julio en Universal+, "90 Minutos" llega como una serie que entiende el fútbol no solo como un deporte, sino como una forma de vida. La historia sigue a Las Navajas, un equipo local, de barrio, que intenta ganar un torneo para evitar que su amado campo de juego termine convertido en un casino.
Y aunque la trama tiene todos los ingredientes de una clásica epopeya futbolística (entrenadores caídos, rivales corruptos, y una estrella del pasado que regresa a entrenar al club), lo que realmente distingue esta producción es el corazón que late debajo de cada jugada.
En medio de este equipo de ‘inadaptados’, como a veces les gusta catalogarse a los miembros del equipo Las Navajas, uno de los personajes más entrañables es Don Gil, interpretado por el veterano actor mexicano Álvaro Guerrero, quien conversó con Soho sobre la conexión íntima entre la serie y sus propias raíces.
“Yo soy de barrio”, dice con orgullo. “Y uno de los elementos más importantes de la serie es justo eso: el cariño, el profundo amor que se le tiene al barrio, pero sobre todo a la gente que vive ahí”.
El actor Álvaro Guerrero, en conversación con Soho, celebra que “90 Minutos” evita caer en estereotipos fáciles, y a veces erróneos, sobre lo que significa ser mexicano, y en especial, ser del barrio. Para él, uno de los mayores aciertos de la serie es su tratamiento auténtico del lenguaje y de los códigos culturales.
Álvaro Guerreo, actor mexicano“No caricaturiza la forma de hablar. A veces se crean supuestos códigos de cómo habla el ‘chilango’ y terminan siendo representaciones burdas. Aquí se logró un lenguaje mucho más real. Yo soy muy ‘raspa’, como decimos aquí. Así que no tuve problema, ni siquiera con las groserías: me salen solitas”.
Guerrero no solo ve la serie como un homenaje al fútbol, sino a la manera de amar que tienen quienes han crecido en comunidad: “Mi mujer fue mi primera novia en el barrio. Nos reencontramos años después, y aquí estamos. Tenemos un código cultural en común, una forma de querer, de amar y de mantener nuestro arraigo. Todo eso está en la serie”.
La historia no solo gira en torno al campo de juego, sino también a las relaciones rotas que encuentran redención. La serie revive el romance entre El Veneno (José María de Tavira) y Alma (Teresa Ruiz), expareja que se reencuentra en medio del caos futbolero. Es una narrativa de segundas oportunidades, de amor, de amistad, de comunidad, donde hasta el personaje más rudo puede mostrar ternura.
“90 Minutos” es mucho más que una serie sobre fútbol. Es un retrato íntimo de cómo, incluso en medio de la adversidad, la comunidad puede sostenerlo todo.
Con diez episodios disponibles para maratonear desde el primer día, esta producción se perfila como una de las más emotivas del año para quienes crecieron viendo partidos en canchas de tierra, entre gritos, tacos al paso y promesas de gloria. Y como bien dice Don Gil, ese tipo de fútbol, el de los que juegan por orgullo, por el barrio y por los suyos, “no se olvida jamás”.
La producción, creada por Joe Rendón y Julio Berthely, logra capturar la esencia de la comunidad a través de personajes entrañables que reflejan la diversidad emocional y social del México popular. Más allá del balón, lo que se juega en cada episodio es la posibilidad de mantener vivo un sentido de pertenencia, algo que Guerrero reconoce como esencial en su vida.