Ni las simulaciones de falta en el área, ni la mano de dios, ni los balones que se pierden en tiempo suplementario son menos graves que lo que hizo este arquero danés en la liga sueca de fútbol; achicar el arco para desfavorecer a los delanteros.
Kim Christensen, arquero del equipo sueco IFK Gothenburg, fue pillado por las cámaras moviendo el arco y reduciendo el espacio de gol, tal como lo muestra en su página principal el Sunday Times de Inglaterra. Lo raro es que el IFK está en las primeras posiciones en la liga y no habría necesidad de hacer trampa, menos contra un equipo como el Ôrebro, que está casi al final de la tabla.
En todo caso la trampa del arquero fue transmitida en directo por televisión nacional, y el árbitro alcanzó a caer en cuenta de que el arco estaba corrido de los puntos que marcan su ubicación, acomodándolos inmediatamente. Sin embargo Dag Wikman, el árbitro del encuentro, no se dio cuenta de que el arquero había sido el responsable (lo habría tenido que expulsar, aunque aceptó que no sabría qué regla aplicar en ese caso ), y dejó que continuara el juego.
Descaradamente Christensen aceptó que no era la primera vez que engañaba a la liga sueca de esta manera, luego de que un amigo arquero le diera el ilícito consejo, según entrevista con el periódico Afonbladet.