Su negocio es uno de los más reconocidos en su sector.
Su nombre es Wilmer Becerra y tiene un local que repara la marca iPhone que se ha caracterizado por ofrecer un servicio de calidad y durabilidad en sus arreglos.
Su local queda en Bucaramanga y tomó mucha fuerza en sus redes sociales, fue tanto el impulso que sus videos y fotos llegaron a manos de la multinacional de la manzana.
Sus redes sociales tienen en nombre de su empresa, Wiltech, una mezcla de su nombre y tecnología en inglés. Cuenta con miles de seguidores que lo han reconocido como un crak arreglando esta marca y a un excelente precio. Sus videos de tips sobre tecnología en TikTok tienen muy buen engagement y esto ha permitido que su local tenga una excelente publicidad, tanto así que ya cuenta con varios empleados.
Wilmer estudió ingeniería electrónica pero no logró terminar la carrera por la situación económica en la que vivía que lo llevó a abandonar sus estudios y conseguir trabajo en un local reparando celulares, pues era una actividad que le gustaba mucho.
En diálogo con la revista Semana contó que “al retirarme de la universidad pude conseguir un trabajo que tenía que ver con la reparación de portátiles y confirmé que lo que me gustaba a mí era reparar. Desde entonces comencé a ver cómo haciendo lo que me gustaba podía convertirlo en un negocio”.
Ya para el 2012 decidió independizarse y abrir un local en donde se dedicaría a reparar iPhone. Desde ahí nació Wiltech. Luego de once años tiene varias sedes de su empresa no solo en Colombia sino en varios países de Latinoamérica como México, Panamá, Argentina, Ecuador, Bolivia y Chile, entre otros.
En un día normal de trabajo Wilmer recibió una carta de Apple en donde le advertían que no podía seguir reparando celulares de la marca porque según ellos se estaba haciendo pasar como reparador certificado de la marca. Y es que la compañía de la manzana vio fotos de los inició de su negocio en donde utilizaba el logo de la empresa. Sin embargo, Wiltech ya tiene su propia imagen.
“Además, me dijeron que por todas esas actuaciones por las que ellos me estaban culpando podría recibir de cuatro hasta ocho años de cárcel. Yo vi eso como una especie de hostigamiento en contra de lo que hacía” contó a Semana.
Luego de que Wilmer le dejó claro a Apple de que no trabaja con piezas ilegales y que no usa su logo para hacer publicidad. Apple le respondió una carta amistosa. “Ellos me respondieron finalmente que todo fue un proceso amistoso, que no es nada de denuncias, que por favor no me altere, que no diga en los medios cosas que no son, pero yo digo lo que está escrito. Con eso ya estoy tranquilo porque no sabía si era una denuncia, si me iban a atacar o iban a hacer algo en mi contra”.
Finalmente el colombiano asegura que Apple le ofreció una segunda alternativa y es que trabaje con ellos como reparador oficial. “Me dijeron que tienen un canal para que sea reparador de servicio técnico autorizado o un reparador independiente. Eso ocurrió en el segundo comunicado. Ya mandé todos los documentos de mi empresa, y hasta ahora, pues simplemente estamos a la espera de que eso suceda”.