10 de abril de 2006

La furia de los elementos

Por: daniela mendoza

Una nota preliminar penosa que no debe disuadir a los lectores ("Leía a Nietszche cuando la depresión era extrema. En los recesos leía a Cioran: En las cimas de la desesperación fue uno de los libros que memoricé con mayor naturalidad"), dos ejercicios de estilo olvidables y tres cuentos de las más alta calidad literaria. Tres relatos que por fin dejan ver de qué material está hecho Charry. A pesar de cierto regusto Bolañesco -el escritor no esconde su debilidad por el chileno, ¿por qué debería hacerlo?- los relatos Efectos Anclados, El Hongo Suárez y La furia de los elementos anuncian la llegada de inquietantes personajes que se tropiezan unos con otros en la oscuridad y de un ritmo tan cenagoso como deslumbrante: "Después entran en un largo silencio, un silencio como de monasterio, de monasterio desmantelado con vista al mar, algo así como un hotel de cinco estrellas en ruinas, devastado por el paso del tiempo, el tiempo que todo lo devastará".
Luis Fernando Charry
Villegas Editores
94 páginas