16 de noviembre de 2004

Cristina Umaña

La idea era que si él es director de cine y ella actriz, los dos montaran su propia película.



Por eso, nada en estas fotos es fortuito. El carro rojo, la cámara de cine, las luces, las bragas negras, el corsé y la claqueta tienen una razón de ser. SoHo puso frente a frente a dos artistas para que cada uno representara su papel de la forma en que quisiera: Camilo Matiz -detrás de su cámara- y Cristina Umaña -detrás de las máscaras que debe usar para cada actuación que hace- montaron un set de película en la Estación de la Sabana de Bogotá, ideal para interpretar los gustos por la velocidad, la acción y el séptimo arte que lo caracterizan a él. Cristina, aparte de haberse destacado en seriados y novelas como La mujer del presidente (que le valió un India Catalina), Paquita Gallego, Punto de Giro y ahora en Todos quieren con Marilyn, se dio el lujo de ser la protagonista
de dos películas colombianas que fueron estrenadas este año: Mal amor y El Rey, esta última postulada por Colombia a la categoría de Mejor película extranjera en los Óscar. Se conocieron, justamente, gracias al rodaje de un video clip de la banda de rock Supervelcro en el que ambos participarían. Finalmente, la banda optó por un video en concierto y debieron esperar hasta ahora para hacer un trabajo juntos.
El resultado de la unión de su talento no habría podido ser mejor, al fin y al cabo la comunicación entre fotógrafo y modelo estaba garantizada: llevan más de seis meses juntos, están en pleno idilio y, ojo, el dragón tatuado en la piel de Cristina representa el signo del zodiaco chino de Camilo, una huella difícil de borrar. En fin, mejor no pensar en eso y bajar la claqueta: luces, cámara, acción.