15 de abril de 2008

Testimonios

Qué se siente ser...mitómana

Mitomanía: qué se siente ser mitómana: síntomas y consecuencias

Por: María Cadavid

Durante gran parte de mi vida he sido consciente de que soy una mentirosa y una maestra para el engaño. Tengo 37 años y desde hace dos entendí que tenía un serio problema y me puse en manos de una psicóloga para sobrellevar mi situación. Es que aunque disfruto mentir, sé que es algo que no está bien y debo superarlo.

Al principio empecé a mentir para lograr permisos en la casa, decía que me iba para un lado y salía para otro, en el colegio mentí y no dejé de hacerlo en la universidad, pero cuando empecé a mentir para sacar beneficios económicos la situación empeoró. Cuando necesitaba plata sabía a dónde acudir y armaba un show de tal magnitud, todo sustentado en mentiras.

Tengo mis cualidades para la actuación y para mí no es difícil inventar un llanto, un lamento y decir lo que sea con tal de conseguir lo que necesito. También engaño para poder entrar a un círculo social y aparentar que soy de determinada manera, siempre buscando beneficio. Lo hago conscientemente.

Cada día me sorprendo de mis tretas, con el tiempo mi mitomanía me ha enseñado que un buen mentiroso debe tener dos cualidades: buena memoria y gran capacidad histriónica, sin eso un mitómano está perdido. ¿Se imaginan que no me acuerde de las mentiras que he dicho? Caería en contradicciones todo el tiempo y me pillarían con facilidad. Por ejemplo, me he inventado cursos y capacitaciones en otros lugares solo con el pretexto de pasear y descansar, luego me siento en el computador y diseño un diploma y santo remedio: ni cuenta se dieron en mi casa.

Yo le he mentido a todo el mundo: a mis padres, mis compañeros de trabajo y mis pretendientes. Un día un novio me pilló con otro, pero fue tal mi capacidad de envolverlo, engrupirlo y mentirle, que terminó pidiéndome perdón. Mis mentiras le han hecho daño a mucha gente que me ha querido, hombres que me han amado, pero de malas, para qué se atravesaron en mi camino.

La mitomanía no se hereda pero mi hijo de 16 años me ha aprendido cosas y le he enseñado varios trucos, le veo madera para cumplir con las características de un buen mentiroso. Confieso que como mitómana disfruto al decir mentiras y gozo cuando engaño a la gente. Siento placer con todo el espectáculo que armo y con la cara que hacen los idiotas que se creen mis cosas. Lo disfruto mucho a pesar de que sé que no es nada normal ser así. También tengo claro que mi enfermedad no es buena y por eso pedí ayuda e inicié un tratamiento médico. Durante una hora a la semana cumplo con una terapia psicológica en donde mi doctora me confronta y me ayuda a entender la mitomanía.

Hoy me siento mejor, y confieso que he tratado de controlar el impulso de mentir y este testimonio es un ejemplo de ello: todo lo que he dicho es la pura verdad.

Contenido Relacionado

Testimonios

Yo trabé a mis amigos con una torta de marihuana

"Lo que yo les hice a ustedes aquel domingo de junio de 1980 no tiene nombre ni perdón": Eduardo Arias.

Testimonios

Historia de mi propio aborto por Virginia Mayer

¿Qué pasa por la cabeza de una mujer que toma la decisión de abortar? ¿A quién acude? ¿Cómo asume el procedimiento? ¿Cóm...

Testimonios

Nunca es tarde para el ejercicio

¿Sabía que después de los 40 los músculos empiezan a perder masa muscular y, por ende, fuerza? Si no hace ejercicio, es ...

Testimonios

Humberto de la Calle antes de entrar a la política

¿Sabía usted que antes de ser vicepresidente, ministro o incluso abogado, el actual negociador de paz fue un abanderado ...

Testimonios

Por qué escogí una carrera en pornografía

A Carly Rae su trabajo como actriz porno la salvó de una depresión y le devolvió la confianza. Pero no todo ha sido buen...

Testimonios

Así salí del clóset y me casé

El escándalo sobre las cartillas para fomentar el respeto a la diferencia sexual en los colegios —que ha incluido marcha...

Testimonios

Yo me colé en la final de la Champions (y alcé la copa con James)

Diez filtros de seguridad y miles de policías no fueron impedimento para que el italiano Gaspare Galasso se colara en la...

Testimonios

Nairo secreto: 10 cosas que nadie sabía

El periodista inglés Matt Rendell fue, hasta hace unos meses, jefe de prensa del equipo de ciclismo Movistar, y debió vi...