El colombiano se dirigía a hacer una diligencia financiera y no quería llamar mucho la atención
El futbolista colombiano del Atalanta de Bérgamo de Italia Duván Zapata se ha visto en la obligación de tomarse un descanso de la competición futbolística, luego de la lesión que sufrío en el músculo semimembranoso del muslo izquierdo en el inicio de la temporada en el partido contra el Torino. Sin embargo, esto no es motivo para que deje de cumplir con ciertas responsabilidades o, como cualquier ciudadano, realizar esas vueltas pendientes.
Con lo que no contaba el jugador colombiano era que en una simple visita al banco, para cumplir con una diligencia financiera, viviría una situación bastante incómoda con el guardia de seguridad de este lugar. De acuerdo a la información revelada por los medios de comunicación italianos Corriere di Bergamo y Gazzetta dello Sport, el Toro fue frenando en toda la puerta y le negaron la entrada a la entidad.
Duván, quien es ampliamente conocido, llevaba puesta una sudadera y una gorra con el objetivo de no llamar tanto la atención en las calles. Sin embargo, al parecer la persona que estaba en la puerta lo juzgo por la ‘pinta’ que llevaba, quizás sin saber quién era, e inmeditamente le dijo: “¿Adónde crees que vas? Este no es un lugar para ti, vete a otro lado”.
Esto generó una gran sorpresa en el jugador de 31 años, pero por suerte Marco Beri, funcionario del banco Fideuram, apareció en escena para que el delantero colombiano pudiera entrar y, además, dejar claro que se trataba de un jugador de fútbol.
“Duván es uno de nuestros clientes, pero seguridad no podía saberlo. Los empleados simplemente estaban haciendo su trabajo, garantizándonos un servicio de seguridad en un espacio intermedio entre la entrada y la calle”, explicó Beri.
Cabe señalar que el incidente no pasó a mayores, pues el colombiano pudo hacer su diligencia sin problemas y, además, desde el banco aclararon que no se trato de ningún caso de racismo en contra del delantero del Atalanta, pues lo único que estaba realizando la persona encargada era cumplir con su trabajo a quien se le habría hecho sospechosa la forma en la que estaba vestido el Toro.