Drama de mujer que ha sivo vetada por su adicción a los tatuajes

Los tatuajes han pasado a ser parte de la vida de muchas personas dejando atrás ese estigma de hace algunos años, en donde se consideraba mal visto que alguien pensara en hacerse alguno en su cuerpo.

Sin embargo, cuando se vuelve una adicción, la cosa pasa a ser preocupante, al impedirle al la persona desempeñar sus labores.

Este es el caso de una mujer británica quien comunicó públicamente su preocupación pues ante la cantidad de tatuajes que se ha hecho en su cuerpo no consigue que la empleen, por lo que está pasando una angustiante situación.

La mayoría de las personas la discriminan

Melissa Sloan, una mujer británica, dio a conocer en varios medios de comunicación que está pasando por una situación preocupante, debido a que ha sido vetada de varios sitios por la cantidad de tatuajes que lleva en su cuerpo.

Ella reconoce ser una ‘adicta’ a los tatuajes y por eso le han prohibido el acceso a varios lugares incluida la escuela de sus hijas.

Además, para completar la situación, muchos empleadores se niegan a darle trabajo por su aspecto físico, lo cual la ha hecho pasar por situaciones difíciles a nivel económico.

La mujer se siente víctima de discriminación y por eso decidió hacer pública su denuncia, pues le está costando mucho trabajo poder sobrevivir junto con sus hijas bajo estas condiciones.

Ella sabe que la causa de todo este problema es la cantidad de tatuajes que lleva en su cuerpo y en su rostro, sin embargo, ella es incapaz de dejar de hacérselos y menos, de mandarse borrar algunos de ellos.

Melissa empezó a tatuarse a los 20 años y desde entonces reconoce que es adicta a ellos. Incluso se ha llegado a tatuar hasta 3 veces por día. Además, reveló que su zona preferida para nuevas “creaciones” es el rostro, por lo que, según ella, ya parece un ‘pitufo’.

La mujer se ha tatuado varias capas en el rostro, por lo que, según sus vecinos, causa “terror”; sin embargo, esto no ha pausado su pasión, pues espera tatuarse hasta que muera.

Una caso de intolerancia llevado al extremo

“Me han arrojado cosas, he sido apodada, y me han quemado con cigarrillos”, denunció la mujer. Lo que deja en claro la intolerancia de la gente frente a sus tatuajes y a pesar de lo común que es ver a personas en todo el mundo con algún tipo de tatuaje, todavía hay quienes tienen comportamientos y calificativos degradantes frente al hecho.

Si bien es cierto que la cantidad de tatuajes que lleva Melissa es exagerada, no hay que olvidar que tiene todos los derechos a poder vivir buen y con respeto, como cualquier otra persona.

La británica de 46 años, contó al medio Brightside que trabajaba limpiando baños, sin embargo, al no poder ocultar los tatuajes de su cara fue retirada de su puesto. Ahora, ella asegura que ha vuelto a buscar trabajo, pero que por su aspecto no la contratan.

“No puedo conseguir trabajo. (...) Solicité un trabajo limpiando baños donde vivo, y no me aceptan debido a mis tatuajes”, contó.

El drama que vive esta mujer la ha hecho llegar a pensar en suicidarse, en vista del rechazo que ha recibido. “Nunca seré aceptada, pero si la gente se tomara la molestia de pasar un día conmigo sabría que soy alguien agradable”.