Fiestas de la Policía tienen “mamados” a los habitantes de barrio en Bogotá

Los habitantes de un barrio de Bogotá, denuncian estar “mamados” de las fiestas de la Policía, que incluso no los dejan dormir por el alto volumen del ruido.

Con la llegada de fin de año, inician las fiestas de despedida de diferentes empresas y entidades, que reúnen a sus trabajadores para festejar los triunfos del año que termina con rumbas, almuerzos y obsequios.

Pero contrario a lo que muchos pensaríamos, que estos encuentros son solo para risas, tragos y diversión, recientemente se conoció la incomodidad que han llegado a causar este tipo de fiestas en un sector de Bogotá.

Y es que habitantes de un barrio de la capital, denuncian estar cansados del suplicio en el que se han convertido las fiestas de fin de año de la Policía.

Fiestas de la Policía tienen “mamados” a los habitantes de barrio en Bogotá

Se trata de las personas que viven en cercanías al Club de Agentes de la Policía ubicado en la carrera 68 #46-52, quienes manifiestan que desde hace varios días, no han podido descansar en sus hogares, por el fuerte ruido que sale desde las fiestas.

La ensordecedora bulla que sale desde el club, que ha llegado a ir hasta altas horas de la madrugada, no han permitido dormir durante los últimos días miles de personas que viven en la zona, según denuncian.

Por medio de redes sociales han dado a conocer el caso, donde un periodista de revista Semana manifestó que “residentes del sector Salitere en Bogotá denuncian que la Policía lleva varios días de fiesta en el Centro Social de Agentes y Patrulleros con música a alto volumen hasta altas horas de la noche y la madrugada, lo que les ha impedido poder conciliar el sueño”.

De hecho, ante las cámaras de Noticias Caracol también hicieron la denuncia, donde manifestaron que incluso instalaron una gigantesca carpa para hacer sus celebración.

Según una ciudadana que habló para el noticiero, el ruido por la música estaría desde el

“Terrible porque desde el 7 [de diciembre] empezaron a armar esa carpa. El 8 ya empezó la bullita y el 9 fue hasta las 5 de la mañana. Nosotros como búhos con los ojos abiertos porque no nos dejaron dormir; el 12, otra vez y hoy, de nuevo. Ya llevamos tres noches sin poder dormir”, manifestó una de las habitantes del sector.

Ahora se preguntan qué entidad les podría ayudar a solucionar esta problemática, porque por evidentes razones, no han recibido apoyo de la Policía.