Ford patenta un motor de combustión que se alimenta de hidrógeno

El nuevo motor de combustión de Ford será alimentado por hidrógeno llega para controlar esa relación entre el combustible y el aire, que es uno de los factores más relevantes que tiene un motor y por su puesto para cambiar la historia.

Hace poco, la marca anunció que su negocio se dividiría en dos áreas: Blue para los vehículos térmicos y Model E para los eléctricos, lo que quiere decir que la firma seguirá con los motores tradicionales y aún no está lista para dejarlos ir.

¿Por qué el hidrógeno como combustible?

Resulta que la Oficina de Marcas y Patentes de los Estados Unidos registró una patente de un motor de combustión interna que se alimentará por hidrógeno. Será capaz de producir una mezcla de 68 partes de aire, con una parte de hidrógeno. Lo interesante es que se puede visualizar la manera en que se desarrollará la relación entre aire-combustible.

Además, respecto a los sistemas de sincronización de válvulas, sistema de inyección directa y la recirculación de gases, serán los encargados de hacer que se suministre el hidrógeno para que luego llegue a los cilindros.

Este indispensable método podría llegar a inyectar hasta un 15% más de potencia comparada con la de un motor normal de gasolina, según el portal especializado, El Motor.

Se trata del primer paso para descubrir otro uso del hidrógeno, de hecho, uno menos técnico de los que están programados para el uso exclusivo de los carros eléctricos.

Ford estaría creando un motor de combustión turboalimentado y con inyección directa que usaría el hidrógeno como combustible. Al parecer lo que quiere es hacer que el aire y el hidrógeno se mezclen justo a tiempo, lo que generaría eficacia, y también, con el apoyo de la inyección y el turbo se evite la predetonación, es decir, que explote.

La cuestión es que cuando se comprime, el hidrógeno puede llegar a explotar, así que el plan de Ford es controlar cuando justamente eso pase, por ello necesita recibir la mezcla ideal de oxígeno en las cámaras, lo que permitiría evitar las pérdidas de potencias y los demás daños que surgen a causa de las predetonaciones.

Electrificar el mercado es algo que tienen planeado las marcas y en ese sentido, los motores diésel y gasolina, al parecer, tienen los días contados y están próximos a desaparecer.